jueves, 29 de enero de 2015

Guillermo Cochez: Dios proveerá

Cuando creíamos haberlo visto todo en política, se nos aparece este cuestionado personaje, por su ideología y trayectoria de vida, ateo y solapado enemigo de todo lo que huela a religión, a invocar la bendición de Dios para que lo ayude a resolver los agobiantes problemas que aquejan a su país, causados precisamente por las tantas bendiciones que el mismo recibió en abundancia de ese Dios y que, corrupción, dilapidación, orgullo, abuso, demagogia, violación de derechos, derrocharon durante 16 largos años y que ahora faltan dramáticamente. Como me decía un veterano sacerdote, cuando están por morirse, siempre se acuerdan de Dios. Enhorabuena, pues.
El abuso del poder se ha apoderado de nuestros países. Ello, además de pisotear los derechos humanos de nuestras poblaciones y de convertir los sistemas políticos en especies de caricaturas, genera pobreza y destrucción, afectando a los más necesitados. Hablan de que favorecen a los pobres pero al final son estos los que más se perjudican.
La Conferencia Anual de Davos, Suiza, congregada la pasada semana, ha planteado preocupación por lo que está sucediendo en Venezuela, Argentina y Brasil. Países ricos, pero inexplicablemente pobres en términos de transparencia y rodeados de la incertidumbre que causan grandes nubarrones de corrupción política y excesos de poder
Panamá no está en esa lista, pero bien pudo estarlo de ganar en mayo pasado el partido Cambio Democrático que llevó a la presidencia a Ricardo Martinelli en 2009 con 62% de los votos. Lo que se está descubriendo con el encarcelamiento de algunos de los personeros del gobierno anterior, además de procurar destruir las instituciones democráticas, se dilapidaron en enormes actos de corrupción varios miles de millones de dólares.
Gracias a la sociedad civil y al esfuerzo de los medios de comunicación en el descubrimiento de los ilícitos cometidos durante ese quinquenio, con el apoyo decidido de la Iglesia Católica solicitando transparencia en los pasados comicios y para dotar a la gestión gubernamental de mayor transparencia, ganó las elecciones Juan Carlos Varela y hoy Panamá enfrenta un reto jamás afrontado en nuestra historia.
Por un lado funcionarios de muy alto nivel presos pero con posibilidad de encarcelar al ex presidente Martinelli, tal como ha ocurrido en Guatemala y Costa Rica. Esto logró que evitásemos que Panamá se encaminara a escenarios parecidos a los de Chávez en Venezuela. Disfrazaron con el populismo la corrupción jamás vista en Panamá al igual que ocurrió en Venezuela con Chávez y con Maduro.
Afortunadamente, en Panamá aún podemos esperar mucho para elevar al cielo ese Dios proveerá que ha invocado Nicolás Maduro en su incapacidad de seguir manteniendo a flote una Venezuela que por largos 16 años ellos mismos ayudaron a hundir tan profundamente como hoy se encuentra.
Como el ave fénix Venezuela se levantará rápidamente para ocupar el sitial que le corresponde dentro del continente americano.
 
*Abogado y diplomático
 
Guillermo Cochez
Dios proveerá
El Nacional. Caracas, 28 de enero de 2015