domingo, 26 de abril de 2015

Marta Colomina: Gobierno asfixia a medios para silenciar sus delitos

A medida que se acelera el deterioro del régimen de Maduro dentro y fuera de Venezuela, y la crisis económica, política y social crece impulsada por la corrupción e incapacidad oficiales, la iracundia del gobierno estalla contra imaginarios “enemigos terroristas que conspiran” contra la inexistente estabilidad democrática, y acusa a los pocos diarios y medios críticos que sobreviven al acoso oficial, de ser los grandes instigadores de ese desprestigio que ya luce imparable ante la debacle del país y las groseras ofensas que Maduro profiere a diestra y siniestra contra mandatarios y figuras públicas nacionales e internacionales que han expresado su rechazo a la violación de derechos humanos en Venezuela y solicitado la liberación de los presos políticos.
A un gobierno cuyos altos cargos son señalados por organismos internacionales de violación de derechos humanos, corrupción desmedida y lavado de capitales, para cuyos delitos han utilizado pasaportes diplomáticos emitidos por la Cancillería venezolana a nombre de “asesores” con antecedentes penales por tráfico de drogas al supuesto servicio de un ministro y hasta del jefe de la División Antidrogas (como demuestra la documentación de la Fiscalía y policía de Andorra) le urge silenciar a los medios críticos, para que no conozcamos esos delitos y los que abultan el dossier del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, y la triangulación de capitales entre Venezuela, Panamá y Andorra con dinero de Pdvsa. Mientras otros países petroleros ahorraron durante la bonanza de los precios del crudo, el chavismo dilapidó a manos llenas recursos que habrían alcanzado 1,5 billones de dólares entre ingresos fiscales y petróleo. El régimen endeudó al país, destruyó la agricultura y la industria y derrochó esa fortuna en regalos a sus compinches; en chatarra militar para guerras e invasiones imaginarias, y en las cuentas de boliburgueses en paraísos fiscales que ahora salen a flote. La hegemonía comunicacional y la censura han venido silenciando la enorme corrupción sobrevenida con la bonanza. Tareck el Aissami, gobernador de Aragua, acaba de reconocer que Chávez le pidió silenciar la gran corrupción de Rafael Isea, su antecesor en el cargo, hoy testigo protegido en Estados Unidos y presunto responsable del milmillonario desfalco de las notas estructuradas y otras grandes corruptelas cuando fue ministro de Economía, que también fueron permitidas a otros muchos militares y civiles rojos. Ahora Maduro está liquidando los activos del país: el BCV acaba de empeñar el oro de las reservas por 1 millardo de dólares. Mucha gente pasa hambre, como revela la encuesta Encovi (UCV-USB y UCAB): 80% dice que no le alcanza el dinero para comprar comida; 11,3% hace 2 comidas o menos diarias; la lista de alimentos más comprados son harina, arroz y pan, mientras que alimentos ricos en proteínas, como el huevo o las sardinas, ya no están en la lista de los más consumidos. El pueblo sustituye la carne con mortadela. La pobreza subió a 48% mientras Maduro insulta a Fedecámaras (“oligarquía especuladora, parásita, ladrona, que tiene los hilos de distribución de productos y los esconden”). Gran mentira, porque es el gobierno el que tiene el control de la distribución de alimentos, cuyas plantas no producen ni harina de maíz ni nada. Los que producen son los empresarios, a quienes se les niegan los dólares que acaparan las empresas rojas de maletín. Maduro asfixia a los diarios críticos al negarles la compra del papel que necesitan, mientras los pasquines rojos lo tienen por toneladas. El Nacional, Tal Cual, El Carabobeño, El Correo del Caroní y otros agonizan sin papel por no haberse rendido ante el poder. La arremetida es general: Conatel abrió un proceso al programa 100% Venezuela, de Televen, por “contener mensajes para ofender al pueblo de Venezuela, para humillar y descalificar”, cuando en realidad el programa  es una de las pocas ventanas que tiene el pueblo llano para testimoniar su opinión sobre la inseguridad reinante o los pésimos servicios públicos, o  solicitar ayuda para sus muchos problemas generados por la desidia oficial y la pobreza. Todos los directivos de El Nacional, Tal Cual y La Patilla fueron demandados por Diosdado Cabello por haber publicado unas declaraciones hechas por su ex jefe de escoltas, Leamsy Salazar, hoy testigo protegido en Estados Unidos, aparecidas en el ABC de España. Lo que se hace en democracia es pedir un derecho de réplica y demostrar la posible falsedad de lo publicado, aunque nos tememos que el fin de esa demanda no es restaurar “el buen nombre” del demandante, si no amedrentar y hasta cerrar las únicas ventanas democráticas que nos quedan.
Ocho demandas judiciales ha sufrido Tal Cual. En su editorial “Diosdado, no te tememos”, relata cómo los jueces rojitos cumplen el objetivo del poder, que siempre ha sido el mismo: “Silenciarnos, que nos autocensuremos, que seamos complacientes con el gobierno. Que aceptemos, apoyemos y ocultemos la violación permanente de la Constitución; que miremos para otro lado ante la profusa e intolerable corrupción (...) que aceptemos la pretensión de convertir a Venezuela en un cuartel. Que seamos cómplices ante la creciente violación de los derechos humanos”. Y concluye: “No nos vamos a autocensurar (...) Seguiremos dando la pelea. Los venezolanos demócratas pueden tener la plena seguridad de que seguiremos diciendo las cosas claro y raspao”.

¿Vamos a seguir indiferentes y dejar a estos medios y directivos valientes a merced de la furia delictiva de un gobierno sin apoyo popular y violador de nuestros derechos? Nunca como ahora la protesta pacífica en defensa de los medios fue tan necesaria y tan justificada.

Marta Colomina
Gobierno asfixia a medios para silenciar sus delitos
EL Nacional. Caracas, 26 de abril de 2015

Color de Hormiga: La demanda cantada

El presidente de la Asamblea Nacional venezolana, Diosdado Cabello, demandó este martes al diario El Nacional, el portal de noticias La Patilla y el semanario Tal Cual por reproducir una noticia del periódico español ABC, en la que un capitán de la Armada venezolana lo acusaba de ser el cabecilla de un cártel del narcotráfico. La demanda abarca a 22 responsables
Por Editorial El Nacional C.A aparecen: Miguel Henrique Otero Castillo, Ramiro Óscar Molina Ríos, Mariana Otero Castillo. Argenis Rafael Martínez Mota, José Simón Elarba Haddad, Oswaldo Karam Macia, Luis Carlos Serra Carmona, Juan Andrés Wallis Brandt,  Omar José Delgado Lugo, Jorge Papatzicos Gianopulos, Vivianne de Lourdes Font Fernández, Ramón José Medina Simancas, Beatriz Cecilia De Majo, Carmen Elena Macia Fortique, Leopoldo Eduardo López Mendoza;  por Tal Cual: Teodoro Petkof Malec, Juan Antonio Rafael Golia Amodio, Francisco Layrisse, Manuel Antonio Puyana Santander, y por Inversiones Watermelon C.A (La Patilla) Alberto Federico Ravell Arreaza, Isabel Cristina Ravell Nolck  y David Alberto Moran Bohorquez.
Los costos
De ser halladas culpables, las 22 personas deberán pagar cada una al presidente de la Asamblea Nacional 300.000 bolívares. La demanda será interpuesta en un tribunal penal de la ciudad de Caracas a los directivos y gerentes de los tres medios de comunicación por “difamación agravada continuada”, una figura establecida en el Artículo 442 del Código Penal.
Los abogados de Diosdado Cabello solicitan al juez que le sea asignada la causa, emita medidas cautelares de presentación periódica ante un tribunal cada ocho días y, por presunción de “peligro de fuga”, que les prohíba la salida del país, incluso de la localidad en la cual residen o el ámbito territorial que decida el tribunal, contra Alberto Federico Ravell y otros dos trabajadores del portal La Patilla, Miguel Enrique Otero y 14 personas pertenecientes a la junta directiva del diario El Nacional, Teodoro Petkoff y tres miembros más del semanario Tal Cual.
Los abogados acusadores resultaron ser los mismos señalados meses atrás en esta columna:  los exfiscales del Gobierno Daniel Medina y Alejandro Castillo, con la inclusión de la Dra. Ytala Hernández Torres.
La intepretación
La acusación contra directivos de El Nacional, La Patilla y Tal Cual es un golpe mortal contra la libertad de expresión y los principios del derecho penal consagrado en la Constitución y en leyes penales”, opinó  el abogado penalista Alberto Arteaga Sánchez
“Hemos regresado a la etapa más oscurantista de la persecución penal, en la cual ni siquiera se castiga por sospechas o falsas acusaciones, sino por la atribución arbitraria de un hecho con el cual no se tiene relación alguna. Se trata de la arbitrariedad hecha ley”, expresó.
Al analizar la acción de Cabello, señaló: “La demanda de difamación no procede cuando un comunicador difunde una noticia que proviene de una fuente reconocida, en este caso ABC. Si se admite, se afecta de la manera más arbitraria el derecho a la información y a la libertad de expresión. Ni siquiera de agencias acreditadas podrían trasmitirse noticias, sino sólo aquello que le consta al periodista por sus propios sentidos”.
Criticó que se acuse a directivos por una información difundida por su medio, máxime cuando no forma parte en “la acción pretendidamente constitutiva de delito, ni objetiva ni subjetivamente”.
Calificó de absurdas las medidas de prohibición de salida del país y presentación al tribunal con la simple admisión de una acusación por un delito de acción privada, sin oír a los acusados: “La justicia penal no se puede mover ahora ‘en operaciones cambote o cayapa’, no para liberar, sino para encarcelar a quien forme parte de empresas consideradas como enemigas del sistema socialista”.
“Patriotas cooperantes”
Tal como hemos venido informando, el programita Con el mazo dando no pega una. Todas las semanas  desmienten al capitán Cabello,  su conductor, que trata de imitar al asqueroso Mario Silva. Esta vez le toco el turno al aspirante a diputado por Catia Saverio Díaz (PJ), quien fue agredido y golpeado. Cabello lo desmiente  a través de sus famosos “patriotas cooperantes”, que de verdad están “pelaísimos”. Díaz, por su parte,  hasta le pidió un derecho a réplica pero, olvídense, no se atreven a darle replica a nadie pues quedan al descubierto.
La respuesta
“Lo que no dice Diosdado Cabello, ni La Iguana TV, ni el Canal de la Asamblea Nacional TV, ni los moderadores de Zurda Conducta, ni el presentador Pérez Pirela, ni ninguno de los otros famosos que se han hecho eco de la campaña de vilipendio en mi contra, es que:
“El ataque del que fui objeto junto a otros vecinos de Catia, está documentado por la PNB, quienes realizan una investigación interna para verificar la actuación de la comisión de PNB presente en durante los hechos, y para dar con los responsables del ataque que en algunos casos están plenamente identificados.
“Fui atendido en un centro hospitalario, y allí conté con el apoyo de oficiales y efectivos la PNB, quienes me demostraron su total solidaridad ante lo ocurrido, demostrándose de esa forma que la mayoría de los funcionarios de la PNB son hombres y mujeres de bien.
“Fui oportunamente atendido por la Comisión de Política Interior de la Asamblea Nacional, presidida por el diputado Dario Vivas, quienes respetuosamente oyeron mi exposición sobre el caso, verificaron mi herida, y ya están abocados a investigar el asunto.
“Fui atendido por el señor Tarek William Saab, defensor del pueblo, quien también pudo verificar mi condición y ya la Defensoría está al tanto de la cuestión. Tarek William me expresó su repudio a todo tipo de violencia, y yo le he manifestado mi voto de confianza para que se investigue el caso.
Los puntos anteriores dejan en claro que está plenamente verificada la autenticidad de lo ocurrido el sábado 18 en Catia. Más que decir que fue un ‘ataque contra Saveri’. Aclaro que fue un ataque contra los vecinos de Catia y la propia comunidad local. Los otros golpeado, heridos, y humillados, aunque son menos notables mediáticamente, no pueden ser olvidados, pues son un servidor de ellos.
“La campaña de vilipendio que ha iniciado la red mediática del Estado, amerita que me pronuncie para exigir una réplica acorde al alcance de los insultos e humillaciones a mi persona que se ha generado. Y por tanto solicitaré lo siguiente:
“Que el señor Diosdado Cabello me dé un derecho a réplica en su programa de TV. Tengo derecho a desmentir y demostrar mi fortaleza moral. Solicito que me reciba en su programa y aclare que sus especulaciones no tienen base en la realidad. Igualmente invito al señor Cabello que se entere de lo que ocurre en la AN que preside, y que antes de lanzarse por el barranco de vilipendiarme en su programa, primero verifique el trabajo de la comisión de Política Interior de la AN, la Defensoría del Pueblo, y PNB.
“Que todos los programas de TV y medios que se hicieron eco de la campaña de vilipendio en mi contra, me den derecho a replicar y defender y nombre.
“Públicamente quiero solicitar que se investigue el caso y se dé con los responsables del ataque. Solicito que se haga cumplir la Ley, y que no se tolere impunidad alguna. ¡Si alguien considera que he cometido delito de simulación, que me lleve a la cárcel! Si alguien cometió el error de mal poner mi nombre, que se disculpe públicamente”.
Tips
Los artistas Roque Valero y Leonardo Villalobos compraron los dos  estudios de Venevisión  del Centro Comercial Los Cedros,  en Caracas, por la bicoca de 10 millones de dólares, a quien le hicieron ese mandado y cuanto se ganaron, pa’ eso es bien buena la “robolución”.
Recomendación
Le recomendamos al conductor de Con el mazo dando que le aumente el sueldo a los “patriotas cooperantes” o los cambie, (casi todos son del SEBIN)  ya que están trabajando pa’l gobierno y para la oposición. Rolo de vivos.

Color de Hormiga
La demanda cantada
Diario Las Américas. Miami, 27 de abril de 2015