sábado, 6 de diciembre de 2014

Fausto Masó: Guarapita para febrero

Los ingenieros petroleros venezolanos están aceptando trabajar en climas inhóspitos con temperatura de 30 grados bajo cero, donde ganan hasta 100.000 dólares al  año, en Venezuela reciben un salario de hasta 120 dólares mensual si se calcula el sueldo al cambio real, el libre. Esta es la razón por la que Pdvsa no aumenta su producción, pierde constantemente personal calificado. A este paso se queda en el país el que ya está muy viejo para emigrar, o no sabe hacer nada. Hasta los estudiantes de Comunicación Social se van para Panamá.
Chávez y Maduro ordenaron aumentar la producción, pero se olvidaron de corregir un pequeño error: Pdvsa es la empresa petrolera que paga los peores sueldos en el mundo. Así no se puede.  Solo los militares en  los departamentos de compra siguen contentos con sus bajos sueldos.
Ahora, en algún momento de una conversación de café se anuncia que una discusión en El Silencio degenerará en un nuevo 27 de febrero y todos seremos felices. A continuación le piden la cuenta a Elvis y protestan por el precio del café. En cambio, no se habla de las elecciones para la Asamblea que si están a la vuelta de la esquina y que si transformarán al país, con tal que las tomen en serio. No hay otra cosa en el horizonte. Es la verdadera salida, la única. Si perdemos esta oportunidad apaga y vámonos y pronto se marcharán de Venezuela hasta las cachifas.
El gobierno perderá las elecciones porque está seguro  que no las perderá. Eso es lo malo de las encuestas pagadas, los clientes llegan a creérselas.  Ojalá que se bajen tarde de las nubes.
El país lleva décadas con una política petrolera enloquecida que solo ha servido para hacer rico a los productores que no son de la OPEP. Chávez, igual que los gobiernos civiles, proponía siempre bajar la producción para subir los precios, algo absurdo. Así se logró que el barril subiera a 150 dólares y hasta en el Vaticano buscará petróleo en la plaza de San Pedro o junto a la torre Eiffel. ¡Como le gustaba decir al presidente eterno que teníamos las reservas mayores del mundo mientras bajaba la producción! En realidad desde hace muchos años la política petrolera ha sido una locura.
Ahora está de moda lamentarse que la riqueza petrolera no desarrolló al país. Habrá empresas cuando le abramos las puertas a las multinacionales y a los empresarios criollos. El gobierno podía crear la CVG, pero a continuación debió privatizarla tan pronto empezó a dar perdidas. Hizo lo contrario, cuando dio ganancias en manos privadas la estatizó.  Mientras tanto seguiremos quejándonos de que con el millón de millones de dólares no desarrollamos a Venezuela.
No, el gobierno no desarrolla el país.
En demasiados temas el chavismo y el antichavismo piensan idénticas boberías, verdaderos artículos de fe en la historia del país. No hay que sembrar el petróleo, sino dejar a la Central Madeirense abrir supermercados. Esa frase infeliz de sembrar el petróleo divulgó una idea peregrina. En Venezuela se produjo café y cacao cuando no había petróleo, el estado petrolero se dedicó siempre a importar barato y acabar con la producción nacional. Cuando se crearon los fondos del café y del cacao se acabó el cacao y el café
Ahora Pdvsa produce 8.000 barriles por trabajador, producía 26.000 por barril en 2006. Le dan una fortuna a los militares para importar alimentos, en cambio gastan una migaja en aumentar la producción agrícola. Pasaremos hambre y en los puertos desaparecen los containers con cajas de whisky de vino.
Otra cosa, aproveche que en pocos días pondrán a la venta bebida importada con dólares Sicad I, a partir de febrero importarán la caña a dólar libre y con un impuesto brutal y entonces habrá que tomar guarapita, en los próximos días podrá adquirir vino del bueno a precio de gana.


Fausto Masó
Guarapita para febrero
El Nacional. Caracas, 6 de diciembre de 2014