martes, 6 de octubre de 2015

Pompeyo Márquez: Mensaje a las fuerzas armadas

Dirijo este mensaje a las fuerzas armadas porque si en algún momento el papel del estamento militar ha sido determinante para conquistar la democracia y la República civil es ahora. No es retórica, es con toda la fuerza y la convicción que hablamos a la institución castrense, justamente para salvarla pues será en la democracia y en la República civil donde radiqué el porvenir de ellas.

Tiene que haber en su seno sectores que no comparten lo que hace una cúpula militar con un barniz de civil. De esto no tenemos dudas. La experiencia histórica contemporánea da pie para pensar en que en el seno de las fuerzas armadas se agiten tendencias. La trayectoria de las fuerzas armadas no ha sido lineal, jugó un papel con López Contreras e Isaías Medina; actuó en el golpe de 1945 y los mismos que dieron ese golpe fueron los actores del Golpe de Estado de 1948. Siempre Pérez Jiménez jugando el papel predominante en el liderazgo militar, por ejemplo, ya es evidente quien fue el actor del secuestro de Delgado Chalbaud aunque no pensó en que los acontecimientos iban a concluir en el asesinato. Pero tuvo que retroceder y traer a Germán Suarez Flamerich que era el embajador de la dictadura en el Perú y además convocar a elecciones en las cuales sufrió una derrota aplastante, y la carencia de unidad y de un propósito de poder condujo al Golpe de Estado del 2 de diciembre de 1952.

A partir de entonces, la represión desatada fue feroz, no había paz para los disidentes hasta que entre el 1956 y el 57, como escribe Simón Alberto Consalvi... "Venezuela perdió el miedo." Se constituye la Junta Patriótica que agrupaba a todos los sectores políticos del momento. Se producen los levantamientos militares de Hugo Trejo y Martín Parada el primero de enero de 1958 y ello abre un boquete por el cual se metió la acción civil. Esa discusión sobre que las masas salieron a la calle después de las FFAA no tiene sentido. Son 10 años de resistencia civil y de luchas callejeras, más la huelga del 21 de enero, el factor que dio al traste con la dictadura, dando paso a un gobierno encabezado por el Contralmirante Larrazábal.

Como se puede observar en esta breve reseña, las fuerzas armadas actuaron para bien y para mal y esto hay que tomarlo en cuenta históricamente para reafirmar la confianza en que en el seno de esas fuerzas se agitan tendencias democráticas que actuarían a favor de la democracia ante una votación mayoritaria que exprese los deseos de cambio del pueblo venezolano agobiado por la crisis.



Pompeyo Márquez
Mensaje a las fuerzas armadas
Tal Cual. Caracas, 6 de octubre de 2015