Aunque la Fundación inicia su relación laboral con Venezuela desde el año 2.002, es decir tan sólo un año después de su creación, como consecuencia de un convenio suscrito con la Asamblea Nacional, ya desde 1.999 miembros de su directiva asesoraban a la Asamblea Constituyente en la elaboración de una nueva constitución, como es el caso de los profesores de Derecho Constitucional Roberto Viciano Pastor y Rubén Martínez Dalmau, ambos de la Universidad de Valencia.
El 17 de junio de 2.014 el periódico El País, publicó un interesante trabajo de investigación del periodista Francisco Mercado, quien analiza los acuerdos suscritos entre el gobierno venezolano y la Fundación CEPS desde el año 2004 hasta el 2.012. Concluye Mercado que la Fundación recibió 3,7 millones de euros del gobierno de la República Bolivariana de Venezuela, lo que representó, según nuestros cálculos, el 65% de los ingresos totales de la Fundación CEPS durante este período.
Ahora bien, si uno analiza con mayor detalles las cifras obtenidas por Mercado en su investigación llega a conclusiones muy interesantes. Así por ejemplo, sabemos que 1.640.317 euros fueron cancelados por el Ministerio del Poder Popular del Despacho de la Presidencia, por asesoría directa de la Fundación CEPS al presidente Chávez en materia de “estrategia política” y para el diseño de Misiones, lo que fue presentado eufemísticamente en los convenios como asesoramiento para el “diseño de políticas públicas que palien la desigualdad de la población venezolana”. El IVSS pagó durante ese lapso de ocho años la cantidad de 862.305 euros por asesoramiento directo para la implantación de un sistema de seguridad social en Venezuela. Quizás el acuerdo mas absurdo fue el suscrito por el MINPOPO para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz, para la “formación y la capacitación del funcionario de prisiones”. Digo absurdo porque en toda lógica cabe la pregunta, ¿Qué saben unos profesores de ciencias políticas o de derecho constitucional de la formación y capacitación de funcionarios de prisiones?
Otras instituciones venezolanas que hicieron uso de los servicios de la Fundación CEPS fueron: la Vicepresidencia de la República, CANTV, Telesur, CORDIPLAN, BCV, TSJ, los ministerios para la Salud, para el Trabajo y el de Comunicaciones.
¿Existe una relación entre la Fundación CEPS y el partido Podemos? Los lideres de este último argumentan que si alguno de sus miembros han colaborado con la Fundación ha sido en su condición de académico; no obstante, varios de sus dirigentes si son colaboradores directos de la Fundación e integran su directiva, como es el caso de Pablo Iglesias, Iñigo Errejón y Luis Alegre, este último candidato a la Alcaldía de Madrid. Es difícil deslindar lo académico con lo político particularmente cuando la Fundación tiene como uno de sus objetivos fundamentales “fomentar consensos de izquierda”, que es lo que han pretendido llevar a cabo en sus trabajos realizados en Venezuela. Hay información cierta que Pablo Iglesias, durante los años 2.006 y 2.007 estuvo trabajando en Venezuela. Iñigo Errejón es el Director de Investigación de Identidades Políticas de la Fundación GIS XXI y, conjuntamente con su director, el ministro de Energía Electrica Jessie Chacón, suscribió un artículo titulado El chavismo y el nuevo sentido común de época, además de participar en diversos foros de esa fundación chavista. Mas resaltante es el caso de Juan Carlos Monedero que aunque al parecer no colabora con la Fundación CEPS desde hace diez años si es una de las cabezas mas visibles de Podemos y quizás el mas vinculado de sus dirigentes al chavismo. Fue uno de los fundadores, en el 2.005, del Centro Internacional Mirada adscrito al ministerio de Educación Universitaria de Venezuela y durante varios años su responsable de formación; además, entre el 2.005 y el 2.010 fue asesor directo del presidente Chávez.
Como todas las encuestas dan a Podemos como la primera fuerza política y lo de chavista no cobra votos en España, estos dirigentes generadores de ideas y políticas chavistas tienden a presentarse en su propio país como algo muy distinto a lo que promovieron en Venezuela. Por ello declaran que “una cosa es España y otra Latinoamérica”, que a los “españoles no les interesa Venezuela (léase el chavismo) porque lo que les interesa es discutir España”. Pablo Iglesias ha llegado incluso a declarar, en enero de este año, que “el chavismo está agotado” y J. C. Monedero, en mayo del año pasado dijo de manera muy seria “quien dice que queremos convertir a España en Venezuela es un idiota”.
Todo lo anterior ha generado diversas reacciones en Venezuela. Para algunos analistas chavistas, Iglesias y Monedero son unos traidores malagradecidos mientras que para el primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, tanto Podemos en España como Syriza en Grecia, “Es el chavismo que anda por el mundo”.
Fernando Gerbasi
La Fundación CEPS, Podemos y el gobierno chavista
Blog de Fernando Gerbasi. 3 de febrero de 2015