viernes, 22 de agosto de 2014

Maruja Tarre: Embajadora en la ONU

Nunca pensé que escribiría un artículo defendiendo el nombramiento de María Gabriela Chávez como Embajadora alterna en la ONU. Me ha sorprendido la avalancha de críticas ante esa decisión y verdaderamente, algunos señalamientos me parecen muy injustos.

Se le reprocha a la Srta. Chávez su falta de preparación profesional y académica y se ha indicado que es solo "técnica superior en Comunicación Social", graduada en la Universidad creada por su padre. La exigencia de credenciales académicas resulta particularmente sorprendente cuando tenemos un  Presidente en ejercicio que no se ha graduado de nada, ni siquiera de técnico en transporte público. Se ha dicho también que se le envía a un cargo diplomático "para que tenga inmunidad" ante posibles acusaciones de corrupción. Es de preguntarse si esas personas no saben que una hija de Chávez, en Venezuela, tiene total y absoluta inmunidad en virtud de su nacimiento y no necesita ningún cargo diplomático para estar por encima de las leyes.

Otros afirman que hará el ridículo, que nos hará quedar mal, que seremos motivo de burla en la comunidad de naciones. Sinceramente no lo creo. La ONU con sus múltiples delegaciones, tiene cantidad de diplomáticos tan carentes de calificaciones como puede serlo ella. De los 193 países miembros, es muy probable que 187 se dediquen a adularla, con la esperanza de conseguir algún dinero o contratos, como los que repartía su padre. Incluso, el actual alcalde de Nueva York, que tiene su corazoncito mariknol-sandinista, quizás la acompañe a un homenaje al Comandante Eterno en el Bronx.

El único que debe preocuparse es el Embajador Moncada. La Srta. Chávez está acostumbrada a La Casona y es probable que en Nueva York aspire vivir en la bella residencia, que alguna vez perteneció a Averell Harriman, oligarca del Imperio.

maruja.tarre@gmail.com

Maruja Tarre
Embajadora en la ONU
EL Universal. Caracas, 22 de agosto de 2014